No va a pasarme nada

Esas famosas cinco palabras

Viajar puede llegar a ser más caro de lo que, a primera vista, se suele presupuestar. Hoteles, vuelos y dinero para ir de compras: después de incluir todo eso dentro del presupuesto, el seguro de viajes ya no parece ser tan importante. Sin embargo, una visita por el hospital puede costar aproximadamente en los EE.UU. desde USD 5 000 hasta USD 300 000.

Incluso si te encuentras saludable y en forma, el seguro de viajes sigue siendo útil pese a que la buena salud te acompañe durante tu estadía afuera. Son muchos los imprevistos que puedes enfrentar al viajar por negocios o en vacaciones: vuelos atrasados, equipaje extraviado, tarjetas clonadas y una larga lista de imprevistos que pueden obligarte a regresar anticipadamente a casa o a cancelar un viaje por completo.

Pero mi tarjeta de crédito puede encargarse de todo eso, ¿o no?

Muchas tarjetas de crédito premium incluyen un seguro de viajes “gratuito”. No obstante, vale la pena recordar que esas pólizas suelen ser válidas solamente si pagas tus viajes empleando la tarjeta, de modo que los beneficios de esas coberturas, generalmente, no son tan amplios como los de un seguro de viajes pagado por separado.

Familiarízate con tu plan de seguros

Recuerda que al pagar distintos seguros por separado suele haber diferentes planes, los cuales se adaptan a los más variados presupuestos. Es importante tomarse el tiempo de revisar los beneficios que ofrece cada uno hasta encontrar aquel que más te conviene. En especial, vale la pena considerar lo siguiente:

  • Tipos de beneficios
  • Valor de la cobertura médica
  • Valor de la cobertura de accidentes personales
  • Valor de la cobertura por cancelación y término anticipado de viaje

Por último, recuerda que los seguros de viajes pueden ayudar tanto en largas y lejanas estadías como al viajar cerca de casa (Franquicia 100 km desde el lugar de origen del viaje). A pesar de que ya cuentes con un seguro de salud, es probable que su cobertura no te brinde protección cuando te encuentres en el extranjero y que tampoco te ampare en caso de sufrir cancelaciones de vuelos u otros contratiempos relacionados con el viaje.

Así como no es recomendable viajar sin tu cepillo de dientes ni mucho menos olvidar tu pasaporte en casa, tomar un seguro de viajes antes de abordar un avión es igualmente imprescindible.